Cuidado joven, ¡No juegues con ellas!

29264

Cuidado joven, ¡No juegues con ellas!

En el mundo es normal ver como los hombres juegan con los sentimientos de las mujeres. Buscan enamorarlas para robarles su inocencia y luego cambiarlas por otra, alimentando su ego de macho y llenando sus estantes imaginarios de trofeos; cuidado joven, ¡No juegues con ellas!

Pero hermanos tengan mucho cuidado, en la iglesia del Señor eso ¡NO SE HACE!.

Las señoritas de la iglesia son las hijas de Dios y su hermosura está basada en la gracia que Jesús les ha dado.

También te puede interesar El problema de no ocupar nuestro lugar

SUSCRÍBETE

Únete a más de 5.000 personas que ya reciben contenidos exclusivos.
Sólo ingresa tu correo electrónico en el campo de abajo y espera el correo de confirmación.

[wysija_form id=»1″]

Jugar con ellas te llevaría a tener un problema directamente con Dios y «dura cosa es caer en manos del Dios vivo».

También te puede interesar: Para qué el matrimonio

Respeta las hermanas de la iglesia, vela por su integridad y ayúdalas a perseverar, no las mires como ingenuas y desamparadas porque ellas tienen quien las defienda Jesús.

Síguenos en Facebook Generación Pentecostal

Cuidado con las niñas de los ojos del Señor, El murió por ellas.

«Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar» Mateo 18:6.

Por: Eduardo Cuadros

Artículo anteriorEl Dios que sorprende
Artículo siguientePropiedades del nuevo nacimiento

Los comentarios están cerrados.