El orden divino de las misiones

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El orden divino de las misiones

Las misiones en el contexto que nos corresponde a nosotros como iglesia, es llevar lo más grande, lo más glorioso, sublime, lo más elevado, lo más alto, aquello que se remonta al infinito, por el mundo. «El orden divino de las misiones».

Es aquello que ni el mismo universo lo puede contener, es llevar al Dios que creó los cielos y la tierra, es llevar el evangelio.

Y como estamos viviendo una época que no es cualquier época, todas las épocas han sido importantes.

Siempre las rectas finales son más emocionantes y de una cosa estamos seguros y es que pronto aparecerá el que ha de venir.

Pero se nos ha dado vivir los últimos tiempos, así que somos una generación cargada de privilegios.

Tenemos la palabra escrita y como lo que tenemos que llevar a las naciones es el evangelio, es bueno aclarar en realidad, ¿Qué es el evangelio?

El evangelio es el poder de Dios para salvar, el evangelio es Dios mismo, pero no estático, es Dios mismo en acción, actuando en favor del hombre pecador.

En otras palabras, el evangelio es el programa de Dios y ha sido, es y lo será contundente en todas sus áreas, en todos los aspectos.

Esta es una generación que le gusta descubrir su causa y si no tiene su causa no puede ser feliz.

Los jóvenes de la iglesia hemos sido llamados por el todo poderoso y él nos ha entregado una causa.

En una versión de la Biblia dice, que el evangelio es potencia para salud, eso significa que no existe una barrera.

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Que no existe una montaña espiritual o física porque el evangelio puede con las dos cosas.

Si es de quitar la montaña física con el evangelio, la quitamos, pero es en fe y para fe porque escrito está “Si creen verán y serán testigos de los efectos del creer”.

Si es como un granito de mostaza, pues le dirá a la montaña que se quite y le hará caso, el diablo puede tener las murallas que tenga, los muros y las cadenas que tenga para atar a la gente.

En el campo físico se utiliza la dinamita para volar las piedras y hacer muchos trabajos cuando están al frente de la montaña, según la cantidad que le ponga, eso vuela lo que sea.

Una versión dice, que el evangelio es la dinamita de Dios para destruir, acabar lo que sea, que se levante en contra de la justicia, de la verdad y el diablo puede tener lo que sea.

Las jerarquías que sea o los gobernadores que tenga pero por encima de lo que se le ha dado a esta iglesia no hay nada.

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El orden divino de las misiones.

Esta iglesia es diferente, pero no porque haya hecho alguna obra que le amerite serlo, sino por aquel que murió en la cruz del calvario y quiso hacernos a nosotros su pueblo, esto es el evangelio, poder de Dios.

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Este evangelio hay que seguirlo llevando como es, el diablo está haciendo un trabajo últimamente a nivel mundial y es quererle mezclar partículas extrañas al evangelio.

Y él sabe que mezclando todo eso lo debilita y por algunas áreas lo está consiguiendo.

Es maravilloso poder reprender toda partícula y cuerpo extraño que quiera mezclarse con el evangelio, lo sacamos en el nombre de Jesucristo.

Porque si el evangelio puro se presenta tienen que haber sanidades, prodigios, maravillas, señales.

Tienen que manifestarse y liberaciones, desintoxicaciones porque eso es el evangelio, destruye lo que sea porque es Dios en acción.

Aparte de saber ¿Qué es el evangelio?, hay una responsabilidad muy grande y es que, si el evangelio es Dios mismo en acción.

Si el evangelio es la potencia de Dios para destruir las fortalezas, cualquiera no puede llevar eso.

A cualquiera no se le puede confiar semejante gloria, por eso aparece el Señor dio el orden y dijo:

“Rueguen al Señor de la cosecha, para que sea él, el que envíe obreros a su cosecha”.

El hombre que va a llevar esto, no lo elige el hombre, lo elige Dios mismo.

Es por eso que a esta iglesia le ha dado tan buenos resultados este trabajo.

Porque esta iglesia se ha cuidado de permitirle a Dios que escoja y que sea él el que envíe.

Somos una generación privilegiada porque fuimos llamados para vivir los tiempos en que se tiene que reclamar los efectos del calvario.

Porque es que el calvario es la causa más gloriosa, más poderosa que jamás haya existido.

Y cuando él resucitó de entre los muertos, nos entregó la victoria más poderosa que jamás ningún ejército en la tierra la ha obtenido.

Pero a Dios le plació darle esta victoria a esta iglesia.

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El orden divino de las misiones.

Es cuestión de ubicarnos en el lugar donde Dios nos ha dado las cosas, que maravilloso es entender que.

Para que esta gloria nos llegue a nosotros hubo una cantidad de cadáveres, primero Cristo en el calvario.

Segundo todos lo que se pusieron de puente, su sangre, sus cuerpos para ser quemados, para ser entregados a la tortura y ríos de sangre.

Porque ellos pusieron sus mismas vidas para que este mensaje pasase por encima de todo.

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Y finalmente nos llegase a nosotros.

Nadie nos podrá hacer frente porque caminamos sobre la base, sobre la roca sólida, roca inconmovible.

Si usted está lleno de este poder, de esta gloria, vaya métase donde sea porque esto está por encima.

El evangelio tiene que seguir siendo puro si queremos seguir mirando los prodigios y maravillas.

El Señor dijo: “Recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo y luego dijo, y me seréis testigos”.

Todo lo que necesito son unos canales para canalizar lo mío, para que a través de ellos yo pueda hacer lo que tengo que hacer.

De aquí hasta lo último de la tierra y esos somos nosotros, testigos del poder de Dios.

Por: Silvio Solarte

 

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