Negligencia vs diligencia

Todos los seres humanos soñamos con conquistar metas, con alcanzar objetivos que mejoren nuestra vida. Es algo natural querer tener y llegar a la cima; pero debemos aprender a diferenciar entre Negligencia vs diligencia.

Pero también existe un fenómeno muy frecuente y es el querer alcanzar metas sin querer hacer nada.

Por ejemplo:

• Quiero graduarme de la «U» pero no quiero estudiar (pereza).
• Quiero una casa pero me da angustia trabajar (negligencia).
• Quiero adelgazar pero me gusta el chocorramo (sin compromiso).

Este comportamiento hace que la persona sueñe con tener en la vida, pero que a la postre lo que hace es terminar decepcionado y amargado.

Por eso la palabra de Dios dice: «La pereza conduce al sueño profundo; el holgazán pasará hambre». Proverbios 19:15.

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Hoy debemos aprender que en la vida los que alcanzan la bendición de Dios son los diligentes.

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Los que no ahorran esfuerzos para ver sus metas realizadas, son los que no les importa trasnochar o madrugar con tal de terminar aquello que le ayudará a llegar a la meta ya sea en el plano espiritual, físico, económico o educativo.

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Sé diligente, esfuérzate, aprovecha bien el tiempo y tus fuerzas para que al final de la vida no estés culpando a Dios por la pobreza, ni estés arrepentido por haber dejado de hacer lo que tuviste por hacer.

«La mano negligente empobrece; Mas la mano de los diligentes enriquece».

Por: Eduardo Cuadros