Establecer el reino de Dios

Claro que hay que predicar, claro que tienen que conocer al Señor, creer, convertirse y bautizarse, todo eso para establecer el reino de Dios en ese lugar.

Cuando se habla del reino de Dios, no se trata de la gente que carga una Biblia o la gente que se sabe unos coros o la gente que se viste de una manera particular, que tiene una cultura evangélica o una cultura pentecostal.

Realmente el reino de Dios está constituido por aquellas personas que le reconocen a él la autoridad, que disfrutan las cosas que él manda.

Es que los reyes de la tierra mandan para su beneficio, quieren acomodar su ambiente.

Nunca se mezclan con los pobres, al menos que sea para quedar bien en las fotografías.

Pero este rey nuestro, había un ciego que gritaba, lo mandó a llamar y lo sanó.

Dios no pasa de largo, nuestro rey está interesado en cada uno de nosotros y él tiene toda la buena intención.

Este no es un rey que manda cosas para su beneficio, hay quienes imaginan que nuestro Dios es un engreído, un fanfarrón y tristemente piensan que la alabanza es para eso.

Él sabe bien que cuando un ser humano metido en medio de los problemas comienza a decirle todo lo bueno que es, él sabe que comenzamos a depender de él y no de nosotros mismos.

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A veces pensamos que nuestro Dios es tan cruel, que si no nos ve llorando con amargura y dolor, que las rodillas y los codos se nos están partiendo no nos va oír.

Cuando le creemos a Dios nuestra vida cambia y comenzamos aceptar lo que el rey manda, a obedecerlo y entendemos que él se comprometió ayudarnos cuando le clamamos a él.

En la oración lo que hago es declararle a él, que en su palabra yo camino y le creo, que porque tu dijiste Señor que sanas a los enfermos, yo te ruego que me sanes.

Entonces Dios oye mi oración, no es porque mi oración lo conmovió, no, es que él ha querido sanarme pero estaba esperando que yo clamara con fe.

Vea también: Qué es el reino de Dios y para quien es

Porque hay quienes visten como ciudadanos del reino pero su corazón no está allí.

Visten para contender con los que no tienen el uniforme todavía pero que sí están queriendo obedecer al rey.

En esta comunidad de 3mil cristianos que se convirtió el día de pentecostés.

Que fueron bautizados porque es el Señor quien añade a la iglesia los que han de ser salvos, ese grupo.

“Perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones”.

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El gozo de Dios es eterno, no es un deleite temporal como el pecado, a pesar de las dificultades estad siempre gozosos dice el Señor.

Hay 4 aspectos que son fundamentales para establecer el reino de Dios, si algo de eso le falta, tenga cuidado.

Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, no en cualquier doctrina.

Sino en creer en Jesucristo como lo predicaban los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento de pan y en las oraciones.

Una iglesia que no tenga esos 4 fundamentos, comienza a sentir que algún lado se va a caer.

Alguien que no entiende que la doctrina debe estar bien equilibrada con la comunión.

Entonces sabe mucha Biblia pero es agrio con los hermanos, con los vecinos.

En cambio el que tiene comunión, el que sabe que es un solo espíritu con Dios es un cuerpo con ella y después dice el Señor.

Que el que se une con el Señor es un espíritu con él.

Por eso es necesario que la doctrina se enseñe bien, se aprenda bien para que la comunión esté sana.

Si yo no entiendo que la obra social es una muestra de esa comunión de unos con otros a pesar de las diferencias.

La convivencia va a ser un reto toda la vida por ejemplo, los casados tienen que renunciar algunas cosas que aprendieron en sus casas para poder formar un hogar con su esposa.

Cuando alguien quiere ser parte del reino de Dios, lo primero que el Señor le dice es:

“Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese así mismo, tome su cruz y sígueme”.

Por eso es importante estar bien en la doctrina porque la doctrina es como el esqueleto en el cuerpo, no lo vemos pero le da forma al cuerpo.

Cuando una persona tiene alguna alteración en sus huesos se nota, los huesos ayudan en la movilidad del cuerpo.

La doctrina permite que la iglesia marche, le da belleza a la iglesia y puede hacer las cosas.

Una consecuencia de esa doctrina bien llevaba es la comunión, se entiende y se disfruta.

El partimiento del pan es el evangelismo, cuando una iglesia no evangeliza no crece pero cuando usted piensa como piensa el rey.

Cuando le estamos hablando a él continuamente como nos recomendó el rey, no es una hora al día, ni tres horas al día, no deje de orar.

Cuando esté haciendo mercado, mientras pica la cebolla, mientras maneja el carro, vaya orando.

Dios no quiere traer nadie a las malas para que le sirva en la iglesia, él quiere liberarlo de donde está para que le sirva.

Cómo es que nos invitan a un culto y alguien que tiene familia necesitada se queda viendo televisión.

El compartimiento del pan y comunión de unos con otros son dos actividades independientes.

Vea también: En qué consiste el reino de Dios

Para que se conviertan hay que llevar la palabra, hay que llevar el pan y a los que se han llegado hay que compartirles esa comunión unos con otros.

Es necesario vivir conforme a la doctrina de los apóstoles, no se la deje cambiar, esa que se predicó desde pentecostés para acá.

Es la que debemos mantener y hay que perseverar en las oraciones, de esa manera usted podrá servir a Dios en donde quiera que esté.

Gente que lo adore, no para hacerlo Dios sino para entender la grandeza de su Señor y puedan recibir la solución.

Hay personas que han luchado con los vicios, que han tratado de mantener su hogar estabilizado.

Pero la lepra del pecado que es peor que la lepra de Nahaman los tiene consumidos, son valerosos, trabajadores pero cuando se trata de Dios tienen lepra.

Por: Jorge Cristancho