La unicidad de Dios

“Oye Israel Jehová nuestro Dios, Jehová uno es”, entre uno y único hay una gran diferencia, este pasaje es la base de la doctrina de Israel «La unicidad de Dios».

Está comprobado por las escrituras en diferentes pasajes de la Biblia que Israel ni apóstoles fueron trinitarios ni dualistas, sino que fueron un pueblo monoteísta, nunca vemos en la Biblia a Israel creyendo en varios dioses, los que creían en varios dioses se les llamaba politeístas o paganos.

La palabra unidad quiere decir “uno” pero la palabra “unicidad” significa calidad de única, irremediable, solo, irrepetible, es singular e indivisible.

“Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios. Pues aunque haya algunos que se llamen dioses, sea en el cielo, o en la tierra (como hay muchos dioses y muchos señores), para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de él”. 1 Corintios 8:4-6.

Para nosotros solo hay un Dios, aunque se haya llamado con diferentes nombres a través de los siglos y aunque se haya manifestado de diferentes maneras a través de la historia de la humanidad, sin embargo él es el mismo.

¿Por qué es a él a quien debemos exaltar sobre todas las cosas?

Porque él es único y no hay otro igual a él, ni en el cielo, ni en la tierra, ni de bajo de la tierra.

“A ti te fue mostrado, para que supieses que Jehová es Dios, y no hay otro fuera de él”. Deuteronomio 4:35.

“Aprende pues, hoy, y reflexiona en tu corazón que Jehová es Dios arriba en el cielo y abajo en la tierra, y no hay otro”. Deuteronomio 4:39.

El “monoteísmo” está compuesto por 2 términos griegos.

• “Mono” significa “uno”.
• “Teos” significa “Dios”.

“Monoteísmo” significa “la creencia en un solo Dios”.

El “politeísmo”.

• “Poli” significa “varios”.
• “Teos” significa “Dios.

“politeísmo” significa “creencia en varios dioses”.

La unicidad de Dios es sinónimo de monoteísmo estricto y excluye la coexistencia de cualquier otro dios, Dios es uno y no hay otro, también sabemos que él es único.

La unicidad sí acepta que Dios se ha manifestado de diferentes formas pero que él es único, que no es trino.

Esos términos acuñados maliciosamente para cambiar el sentido de la doctrina original.

Israel no fue creyente dualista, uno no encuentra que los santos de la Biblia hayan sido dualistas, ni trinitarios, ellos creyeron en un solo Dios, eso está sustentado en la palabra de Dios.

El problema que Dios con el pueblo de Israel era cuando creían en otros dioses porque adorar otro dios fuera de Dios es idolatría y la enemistad más grande que Dios tenía con los pueblos paganos fue por la idolatría y cuando Israel creyó en otros dioses la Biblia lo llama dioses ajenos.

“Y habló Dios todas estas palabras, diciendo: Yo soy Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. No tendrás dioses ajenos delante de mí”. Éxodo 20:1-3.

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“Maldito el hombre que hiciere escultura o imagen de fundición, abominación a Jehová, obra de mano de artífice, y la pusiere en oculto. Y todo el pueblo responderá y dirá: Amén”. Deuteronomio 27:15.

Cuando un individuo en el pueblo de Israel era declarado maldito se moría porque Dios es Dios celoso.

Él no ha dejado de ser celoso sino que estamos en el tiempo de la gracia y él espera que la gente se arrepienta.

El pueblo de Dios en todos los siglos ha sido monoteísta, hay que predicar la unicidad porque esa es la doctrina antigua que Dios le enseñó al pueblo de Israel.

“Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos”. Jeremías 6:16.

Es nuestro deber como hombres y mujeres responsables como hombres de Dios, preguntar por la doctrina.

Porque esta fue la que Dios le enseñó al pueblo de Israel, a los apóstoles y también la que hemos creído nosotros de nuestros padres espirituales.

Los pueblos paganos eran los politeístas porque cada pueblo y cada persona tenía su propio Dios y hacían pagamentos y todavía los pueblos son paganos.

Pero hay que seguir en el fundamento de apóstoles y profetas, no importa el siglo en que vivamos.

La unicidad cobra vigencia en pleno siglo XXI porque él es el mismo ayer, hoy y por los siglos.

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“Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo”. Efesios 2:20.

Cuando la Biblia habla de padre, hijo y Espíritu Santo no está hablando de 3 personas distintas, ni de 3 dioses.

Está hablando de 3 manifestaciones del Señor y no son solo esas 3, Dios se ha manifestado de muchas maneras, fueron formas que el Señor tomó para manifestarse al mundo.

¿Se puede ser ingeniero, médico y abogado a la vez sin ser más de una persona?

Si se puede y eso no divide a la persona, no lo vuelve 3 personas distintas.

Así es Dios, él se manifiesta como él quiere y no se divide, él es el uno y es único.

Estos conocimientos son el cimiento, siendo uno se manifestó como padre, como hijo y como Espíritu Santo y siguió siendo uno.

Pero ahora hay una diferencia entre Dios y nosotros porque nosotros podemos seguir siendo padre, hijo o abuelo, seguimos siendo uno pero no único, el único que sigue siendo único es él.

“Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve”. Isaías 43:11.

“No temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oír desde la antigüedad, y te lo dije? Luego vosotros sois mis testigos. No hay Dios sino yo. Ni hay Fuerte; no conozco ninguno”. Isaías 44:8.

“Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan”. Santiago 2:19.

Vea también: ¿Qué son los demonios y cómo funcionan?

Ese Dios que es único es también eterno, desde la eternidad hasta la eternidad se sale del tiempo y del espacio.

“¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra? No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance”. Isaías 40:28.

Dice que él creó, no crearon porque solo fue él.

Para que haya un Dios todopoderoso necesariamente tiene que ser uno porque no puede haber 2 todopoderoso.

Cuando Jesús vino a la tierra ni es un diosecito, ni es una fracción de Dios sino que es el mismo Dios de la eternidad pues en Jesús esta toda la plenitud de la divinidad.

“Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad”. Colosenses 2:9-10.

Dios es la unidad perfecta, él es indivisible, no se puede fraccionar y no permita que nadie se lo fraccione con sus filosofías huecas.

Dios sigue siendo uno y único, el Antiguo y Nuevo Testamento él es el mismo y tenemos al único Dios de la gloria.

Entonces Jesús en el  cielo era Dios en forma gloriosa porque Jesús no existía como hijo pero sí estaba en el cielo como Dios y Jesús en la tierra es Dios en forma de hombre.

Esto quiere decir que en el cielo o en la tierra él sigue siendo el mismo Dios de la eternidad.

Por: Clodomiro Lobo