Tener a Dios es tenerlo todo

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Tener a Dios es tenerlo todo

Dios tiene bendición para sus hijos, y uno encuentra en la palabra, que Dios derrama bendición sobre sus hijos. Hablaremos del tema: «Tener a Dios es tenerlo todo».

Los bendecía de una manera extraordinaria, por ejemplo, Abraham, cuando Dios le dice que se vaya de su tierra y de su parentela.

Este hombre toma a su esposa y se marchó, él no sabía para donde iba, pero tenía fe en que Dios tenía una promesa para él.

“Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición” Génesis 12:2.

Dios prometió y lo bendijo, este hombre fue bendecido y fue de bendición para los que le rodeaban.

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Dios bendice a los que aman a sus hijos, pero maldice posiblemente a los que le odian, esta promesa se convierte en una protección.

Porque cuando algunos quieran traer cosas malas a la vida del que le pertenece a Dios, esa protección hace que esas maldiciones vuelvan a donde provienen.

Cuando hay alguien que tiene la bendición de Dios sobre su vida, no hay brujería que le haga daño, ni hechicería, ni mal de ojo.

Eso es verdad porque el ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen y los defiende.

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Tener a Dios es tenerlo todo.

Esa bendición no se quedó en Abraham, cuando murió bendijo

su hijo Isaac, y cuando él murió no se fue la bendición con él, antes de morir llamó a su hijo Jacob y lo bendijo.

Quiere decir, que la bendición no muere, permanece y esa bendición permanece hasta el día de hoy, la Biblia declara que esa bendición es para siempre.

La bendición de Dios hay que buscarla, usted debe anhelarla como lo más grande y preciado de su vida y si alguien ya la encontró proteja esa bendición.

Cuando usted tiene a Dios en su vida hay bendición en abundancia.

La bendición de Dios no solamente tiene que ver con el dinero, la Biblia declara, que raíz de todos los males es el amor al dinero.

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Hay gente que se aparta del evangelio y creen que porque les va bien económicamente están bien, pero están más mal de lo que piensan.

El dinero se acaba, en esta vida lo único verdadero y duradero es la bendición de Dios y es lo que anhelamos, Dios desea bendecir a tu familia y a tus hijos.

Usted podrá hacer lo que quiera, pero si no ama a Dios y a su palabra, nunca obtendrá la bendición de Dios.

Hoy escojo la bendición de Dios, esto no tiene que ver con cosas materiales, tiene que ver con la ayuda y protección de Dios.

Muchas veces no hemos tenido ni para pagar una cita médica, pero hemos visto como Dios suple nuestras necesidades.

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Tener a Dios es tenerlo todo.

La bendición de Dios es más que el dinero, la bendición de Dios nos hace vivir tranquilos.

El Dios nuestro es el que marca la diferencia entre los dioses de este mundo, porque hay dioses que dicen ser dioses, pero el Dios nuestro no es comparado, él es el Dios grande, él que todo lo puede.

Tal vez, estás viviendo una vida sin propósito sin esperanza, pero hay un Dios que está dispuesto a bendecirte hoy.

Si usted le dijera a Dios, ¡oh, Dios bendíceme! El Dios del cielo te quiere bendecir.

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Si te sientes cansado, sin fuerzas, vete con la bendición de Dios sobre tu vida, no haga inversiones sin sentido en su vida.

Dile a Dios que rompa la rutina de tu vida, él quiere usarte y quiere demostrarle al mundo que sí bendice a sus hijos.

Hay padres de familia luchando con sus hijos, ya no levante más el rejo contra sus hijos, la bendición que usted tiene alcanza para sus hijos.

No te reveles contra Dios, usted necesita a Dios en el caminar de su vida, haz como Jacob que luchó con aquel ángel.

No te vayas hasta recibir su bendición.

Por: Carlos Arciniegas

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