El secreto de la felicidad según la Biblia

Tiempos y ocasiones acontecen a todos pero no hay que temer porque Dios está con nosotros. Hablaremos sobre: «El secreto de la felicidad según la Biblia».

La vida del ser humano en términos generales, está diseñada para sufrir y para gozar, hay tiempos de reír y hay tiempos de llorar.

De pronto, en el proceso de la vida cristiana al emprender este camino, algunos se hacen una idea equivocada de lo que es el proceso de la vida cristiana.

Pero es bueno tener una visión clara de lo que es este proceso, a veces llegamos a pensar que en la vida cristiana todo va a ser color de rosa.

Que no se va a sufrir, que no va a ver dificultades, muchos de nosotros pensamos que no íbamos a tener problemas, dificultades pero llegamos a la realidad y nos dimos cuenta que sí las hay.

El cristiano que ya tiene de caminar con Cristo se da cuenta, que aquí se ríe pero también se llora.

Hay momentos que estamos en la cúspide del gozo, de la alegría pero hay otros que estamos en lo profundo de la tristeza y esto acontece a todo ser humano.

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Porque la Biblia dice, que un mismo suceso acontece a todos, al bueno y al malo, al justo y al impío.

“Todo acontece de la misma manera a todos; un mismo suceso ocurre al justo y al impío; al bueno, al limpio y al no limpio; al que sacrifica, y al que no sacrifica; como al bueno, así al que peca; al que jura, como al que teme el juramento”.

Este mal hay entre todo lo que se hace debajo del sol, que un mismo suceso acontece a todos, y también que el corazón de los hijos de los hombres está lleno de mal y de insensatez en su corazón durante su vida; y después de esto se van a los muertos” Eclesiastés 9:2-3.

A todos en la vida nos han llegado momentos felices pero también duros y es ahí donde el cristiano debe aprender a vivir en todos los tiempos.

Nosotros somos hijos de Dios, el día que tomamos la decisión de aceptar a Cristo en nuestro corazón, nos hizo sus hijos.

Pero a pesar que somos hijos de Dios, también nos toca sufrir como los otros seres humanos.

Aunque tenemos la gracia de Dios, debemos entender que tiempos y ocasiones acontecen a todos.

El cristiano tiene tiempos duros, difíciles, hay momentos en la vida cristiana que uno no sabe qué hacer.

Los amigos se van, a veces ni el pastor pasa por ahí, en ocasiones ni la esposa, ni los hijos, momentos tan terribles que el hombre de Dios aún se siente como solo, desamparado.

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Y ahí vienen precisamente las autoacusaciones, es que estoy mal con Cristo, es que estoy llevando una vida desagradable, será que estoy en pecado, ¿Por qué estoy pasando esta situación difícil?

Pero aunque usted crea que está solo, ahí en el momento más difícil, siempre Dios ha estado contigo.

A veces nos sentimos como extraños porque nos hemos comportado bien, hemos sido fiel, pero nos quedamos allá en la profundidad de la angustia, como sin salida.

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Pero no es porque sea infiel, porque esté haciendo algo malo, no, pero aun en ese momento difícil, usted puede estar seguro que Dios es su ayudador.

Él también está con nosotros cuando estamos en la dificultad, lo que pasa es que se da cumplimiento a lo que dice su palabra, tiempos y ocasiones acontecen a todos.

No importa que estemos en sombra de muerte, Dios está con nosotros. “Jehová es mi pastor, nada me faltará”.

Él Dios en la abundancia pero también es Dios en la escases.

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Los tiempos donde uno más puede contemplar la gloria de Dios es en los tiempos difíciles.

Por eso, aquellos que no tienen tiempos difíciles, no pueden contar mucho, los que hemos pasado por esos tiempos, sabemos que en él hay victoria.

“Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese.

Sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría” 1 Pedro 4:12-13.

Los hombres de Dios experimentaron dificultades en sus vidas, pero Dios les demostró que estaba con ellos.

Hay amigos que solo lo son en las buenas, pero Dios es nuestro amigo en todo tiempo.

Cuando uno es fiel debe tener por seguro que Dios va con usted.

Hay creyentes que creen que ellos son solo los que sufren, no, esos momentos nos llegan a todos.

Pero pese a las dificultades conservamos la gracia de Dios en nuestras vidas, basta su gracia.

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Este pueblo las dificultades no lo van a hacer echar atrás porque hemos aprendido vivir en todas las circunstancias.

En todos los tiempos Dios ha prometido estar con nosotros.

Tiempos y ocasiones acontecen a todos, hay la diferencia que Dios está con nosotros.

Cuando estamos enfermos nos sana, si nos toca morirnos nos morimos, pero de algo estamos seguros, que cuando él quiere glorificarse lo hace, pero él está con nosotros.

Por: Nolberto Mosquera