La iglesia sin el Espíritu Santo está muerta

1406

La iglesia sin el Espíritu Santo está muerta

El libro de los Hechos es la continuación del evangelio de San Lucas, por eso, hablaremos sobre el tema: «La iglesia sin el Espíritu Santo está muerta».

En el primer tratado, oh Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar” Hechos 1:1.

Es el libro que narra la historia de la iglesia, su desarrollo y su expansión de una manera grande y maravillosa.

Jesús es nuestro mejor ejemplo, nuestro modelo, quien sigue a Jesús nunca se equivoca, nunca se extravía.

Los hechos de Jesucristo siempre fueron más allá de sus palabras, porque él hizo mucho más de lo que dijo.

Él nunca predicó un mensaje largo sobre la resurrección pero él resucitó muertos, y lo seguirá haciendo.

Nunca predicó un mensaje largo sobre sanidad divina pero él sanó enfermos, sana enfermos y seguirá sanando a los enfermos.

Vea también: El Espíritu Santo no es del pasado

A veces predicamos mensajes largos sobre sanidad divina pero no se sanan los enfermos.

Jesús tampoco nunca predicó un mensaje largo sobre la oración, presentando como un modelo de oración.

Él oraba muy temprano, antes que el sol saliera, en lugares apartados, y en presencia de sus discípulos.

El libro de los Hechos comienza presentando a Jesucristo como nuestro mejor ejemplo y es un libro que tiene unas particularidades especiales.

En este libro no encontramos la palabra culto especial, no necesitaban hablar de eso porque todos los cultos para ellos eran especiales.

No encontramos programas, sino hechos reales, verídicos porque el mejor programa es una iglesia llena del Espíritu Santo.

Una iglesia llena del Espíritu Santo no necesita hacer tanto programa.

El libro de los Hechos no dice “Amén” al final, porque este es un libro inconcluso. La iglesia en Colombia es una continuación del libro de los Hechos.

Pero encontramos un factor determinante, un común denominador, un nivel siempre ascendente.

También puedes leer: Llenos del Espíritu Santo

Es el hecho de ser llenos del Espíritu Santo, pentecostés quiere decir, cincuenta, era una fiesta de santa convocación.

Llamada la fiesta de la semana o el día de las primicias, para ese tiempo el pueblo de Israel había sufrido un desplazamiento.

Había unas nuevas generaciones que habían nacido en otros países, entonces les dijo.

Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad.

Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra” Hechos 1:7-8.

Ellos no volvieron más a sus labores de origen, mantuvieron una expectativa de fe, de confianza, de convicción que Dios iba a cumplir su palabra.

Vea también: El Espíritu Santo es una necesidad del creyente

Por eso, vinieron al aposento alto, y estuvieron 20 días consecutivos orando, estaban sentados esperando ser investidos de poder de lo alto.

Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. De repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados.

Y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos.

Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen” Hechos 2:1-4.

Ellos no descendieron de ese nivel, el ser llenos del Espíritu Santo era una constante para ellos.

No era de manera ocasional, era permanente el Espíritu Santo derramándose en la iglesia, eso era continuo.

Nosotros pensamos que las cosas sucedían de manera tan rápida y seguida, entre una y otra página de los Hechos, puede que haya pasado mucho tiempo.

Ellos vivían llenos del Espíritu Santo porque tenían que enfrentarse a muchas cosas, también tenían el poder de la palabra.

Síguenos en Facebook Generación Pentecostal

No tenían por qué andar amedrentados porque Dios estaba con ellos.

Hay muchos que piensan que solo los apóstoles siguieron siendo llenos del Espíritu Santo, no, eso es un error.

Toda la iglesia siguió siendo llena del Espíritu Santo.

La Biblia dice, que el cuerpo sin espíritu está muerto, la iglesia que no tenga el Espíritu Santo está muerta.

Iglesias que tienen nombres de cristiana pero son mundanas, hablan como cristianos pero se visten como mundanos, no están plenamente identificados con Cristo.

También te puede interesar: Cómo recibir el Espíritu Santo

La iglesia necesita ser llena del Espíritu Santo, porque la vida de la iglesia es el Espíritu Santo.

La iglesia es más que una organización, es un organismo vivo habitada por el Espíritu Santo.

Cuando una iglesia no tiene el Espíritu Santo, trabajar con gente carnal es difícil, porque un creyente del Espíritu Santo se compromete con Dios.

La gente cree que Dios tiene obligación con ellos, pero ellos no quieren tener obligaciones con Dios.

A Dios no se le dan las sobras, a él se le da lo primero, se ama con todo el corazón, con todas las fuerzas.

Lo primero de lo cual nos tenemos que llenar es del Espíritu Santo porque estamos viviendo un tiempo donde la intelectualidad se está interponiendo sobre la espiritualidad.

SUSCRÍBETE

Únete a más de 5.000 personas que ya reciben contenidos exclusivos.
Sólo ingresa tu correo electrónico en el campo de abajo y espera el correo de confirmación.

[wysija_form id=»1″]

Un joven lleno del Espíritu Santo no vive una vida como en un círculo vicioso, que andan buscando cosas que los entretengan. El Espíritu Santo no es para entretener.

Dios nos llama en primera instancia para salvarnos, no para tenernos en las bancas, Dios lo ha llamado a usted para llenarlo del Espíritu Santo porque Dios tiene un propósito con usted.

Nunca se había visto una iglesia tan llena del Espíritu Santo como en este tiempo, pero la iglesia hoy se enfrenta a un modernismo, por eso, necesitamos ser llenos del Espíritu Santo.

Nuestro Dios no es un mito, él es una realidad, el Espíritu Santo es una realidad que hoy se puede recibir.

Vea también: El Espíritu Santo no tiene protocolos

Dentro de los escogidos de Dios hay gente que Dios les da ministerios, el Señor mismo está enviando obreros a su mies.

El sistema de Dios no es un sistema de improvisaciones, es que la iglesia se llene del Espíritu Santo.

Dios no da el Espíritu Santo por medida, hay gente que lo recibe y ya se creen graduados de creyentes.

Pero es un punto de partida, hay algo más allá, algo glorioso y maravilloso es vivir la vida en el espíritu.

Tenga sed por las cosas de Dios.

Por: Carlos Flórez

Artículo anteriorDios quiere bendecir tu vida
Artículo siguienteUn buen líder trabaja en equipo