El hombre en el huerto del Edén

2025

El hombre en el huerto del Edén

Estadía de El hombre en el huerto del Edén ocasionó enemistad con los ángeles caídos Génesis 3:15.

Haciendo un recuento exhaustivo de las clases anteriores, sacaremos unas conclusiones evidentes que nos llevará a entender mejor este artículo.

El libro de Ezequiel 28:13, presenta una figura comparativa de dos reyes quien a su vez, se ha personificado dos cosas:

  • Una, como un lugar especial donde fue creado alguien.
  • Dos, un ser muy sublime, aunque, más tarde se conoció como “diablo o satanás”.

El profeta personifica un lugar y un personaje, quien a su vez comenta de ellos en Edén, en el huerto de Dios estuvo; su vestimenta era de toda piedra preciosa:

  • De cornerina
  • Topacio
  • Jaspe
  • Crisólito
  • Berilo
  • Ónice
  • Zafiro
  • Carbunclo
  • Esmeralda
  • Oro

Suscríbete a nuestro Canal de Youtube

Además de ello, los primores de los tamboriles y flautas estuvieron preparados para el día de su creación.

Al hacer un empalme teologal entre los profetas: Ezequiel e Isaías, logramos entender que este ser, mencionado en estos textos, cierto día miró hacia el norte y vio un lugar con mejores perspectivas, lleno de provisiones.

Acorde como para poner la sede de su gobernación y hacerse igual a su creador. Isaías 14:13.

Tú que decías en tu corazón: subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte: sobre las alturas de las nubes subiré y seré semejante al Altísimo.

Cuando él pensaba y planeaba sus intenciones malévolas y nefandas, Dios, lo desalojó, aún, del lugar que le había asignado, lo desplazó como Caín a ser errante, preparándolo para ser tizón en el infierno con todos sus súbditos.

Querido lector recuerda que nuestro tema de hoy es «El hombre en el huerto del Edén»

Plan creativo del ser humano en acción 

Al ser creado el hombre, tuvo unas peculiaridades y honores excelentes no conocida en otros seres creados anteriormente, porque a éste: Lo hizo a su imagen.

Génesis 1:27 “Y creó Dios al hombre a su imagen”. Y en Génesis 9:6 “Porque a imagen de Dios es hecho el hombre”; luego, sopló en su nariz “aliento de vida”.

Vale la pena resaltar en este artículo, “que el hombre fue hecho a la misma imagen de Dios”, esto demanda alguna referencia a la apariencia corporal de un hombre existente en planes que se irían a accionar en el porvenir.

Te recomendamos ver: El hombre es creado a imagen de Dios

Esto quiere decir: A la semejanza del hombre programado que nacería en Belén de Judá más tarde. “Cristo Jesús”.

En lo que a la época se refiere, su llegada se perpetró en un período específico en la historia, pero en lo que pertenece a Dios, quien coexiste desde la eternidad. 1 Pedro 1:20.

Precisamente, esa imagen oculta fue fotografiada, reproducida y calada en la persona de Adán como primogénito humano de la creación.

Dicho de otra forma: Dios desde la eternidad, su cualidad, su carácter es espiritual e invisible, pero en su plan y propósito anticipado estuvo a bien darse a conocer en su propia imagen reservada, quien se llamó “Jesucristo”.

La Escatología lo presentaba como un niño nacido, quien llevaría en sus hombros el principado y a su vez, su nombre significaría:

  • Admirable
  • Consejero
  • Dios fuerte
  • Padre eterno
  • Príncipe de paz. Isaías 9:6.

En esta imagen oculta, reservada, donde se encubren todos estos honores y privilegios que vendrían más tarde, fue copiada y estampada como un retrato en la persona de Adán.

Te invitamos a seguir con la lectura de hoy con el tema «El hombre en el huerto del Edén»

Síguenos en Facebook Generación Pentecostal

Estimado lector, se considera por varios aspectos primordiales, que el hombre se asemejó a su creador en su naturaleza, en su moral.

El hombre fue creado sin imperfecciones, sin pecado, más bien con toda pureza, santidad privada, con una perfecta e inmaculada equidad de Dios. Por esta razón, él podía disfrutar de un compañerismo absoluto con su creador.

El teólogo Reynolds, interpreta en sus escritos hablando de la creación del hombre, que eso fue lo que el hombre “perdió en la caída” y por esta razón se dio cuenta que estaba desnudo.

Los poderes intelectuales del hombre desde el comienzo, prueban que el hombre no evolucionó de un orden inferior, sino que fue creado a imagen de su creador.

Se le dio la inteligencia necesaria para nombrar a todas las criaturas vivientes, gobernar y dominar la tierra. Se le dio el poder de razonar y tomar decisiones. Fue creado un ser de libre albedrío.

El desenvolvimiento histórico nos cuenta que después de ser creado: Lo puso en un edén de árboles para que disfrutara de todo bien, con dominio propio y con autoridad absoluta de todo lo volátil, acuático y terrestre.

Con ello, está demostrando que, el hombre es la “suprema creación de Dios y contiene su propia imagen absorbida”.

Recuerda nuestro tema de hoy «El hombre en el huerto del Edén»

Me da la idea de pensar, que el diablo estaba observando todo lo que Dios estaba haciendo, desde el momento que Dios principió organizar la tierra, que a su vez, estaba desordenada y vacía.

Luego, principió a crear y a organizar lo que había concebido en su plan anterior y por último creó al hombre, quien, le concedió todo lo perteneciente a su creación terrestre.

Es de anotar que cuando Dios creó todas las cosas en su respectivo tiempo y lugar, vio que todo era bueno; pero cuando creó al ser humano, la evaluación que hizo fue que era “bueno en gran manera”. Génesis 1:31.

También te puede interesar: El hombre que no deja de pensar como niño

Supuestamente el diablo consideró todo esto y por último evaluó el carisma de Dios para con el hombre.

Él podía decir: el “Hombre es considerado como un ser muy elegante, viviendo en un Edén de comodidades amenas, siendo propietario de todo lo perteneciente al globo terráqueo; es el principal de lo creado, con dominio propio de hacer lo que bien le pareciera en el Edén, y con absoluta comunión con el Creador”.

Estimado lector: Pensemos, ¿Qué pensaría el diablo ante todas estas bendiciones otorgadas al hombre?

Lógicamente, eso le ocasionaba a satanás envidia y molestia; de pronto pensaría: El hombre fue creado hace poco tiempo y Dios le obsequió todo lo que creó en varios días, si este hombre llegase a permanecer en Dios, indudablemente, lo va a llevar a aquel lugar que vi hacia el norte, donde yo quería ir, y seguro que va a ser semejante a su creador.

El tema de hoy es «El hombre en el huerto del Edén»

Maquinación y proyecto malévolo de satanás 

Quizás fueron muchas las diferentes maquinaciones perversas que satanás tramaba en su corazón contra el hombre, para ver si lograba desubicarlo de la presencia de Dios.

Te recomendamos ver: Por qué el diablo tentó al hombre en el principio

Llegó el momento que satanás quiso recordar los días pasados que estuvo en el Edén de piedras preciosas hasta el momento que fue expulsado de aquel lugar; todo esto lo quiso relacionar con la creación y la estadía del hombre en el Edén.

Supuestamente, el diablo expresaba: mi estadía pasada con lo que el hombre tiene ahora en este edén, tiene un paralelo parecido; si logro sembrarle lo que yo pensaba, de seguro que Dios lo arrojará del huerto también.

La expulsión me vino, porque cierto día observé un lugar mejor que el que tenía, lo ansié, y quise llegar hasta allá, para allí poner mi trono.

Pensando en esto, lo comenté a todos mis súbditos ángeles, los cuales me animaron que hiciera lo que pensaba, y cuando intentamos hacerlo, todos fuimos destronados del lugar en que estábamos.

Vea también: ¿Qué son los ángeles y cómo funcionan?

Decía Satanás: el hombre fue creado en un día y le dieron todo lo creado antes: animales volátiles, terrestres, acuáticos, vegetación, tierra.

Si éste, permanece en Dios, seguro que Dios lo llevará al lugar que vi donde están las estrellas de Dios al lado del norte, quien a su vez, será semejante al altísimo y ¿Qué más no ira hacer allá?

Tengo que hacer algo para tumbar al ser humano, si logro convencerlo que desobedezca a Dios y meterle en su cabeza que sea semejante a Dios aquí en la tierra, (en el Edén), seguro que le pasará lo que a mí me pasó. Isaías 14:15.

Te recomendamos ver: La desobediencia del hombre

Recuerda que el estudio de hoy es «El hombre en el huerto del Edén»

Además, si logró ponerlo en discordia con Dios me haré dueño de todas las cosas que le otorgaron. San Lucas 4:6, y por poco él quedará bajo mis dominios. 1 San Juan 3:8; lo meteré en la cárcel y no le abriré nunca las puertas. Isaías 14:17.

Todo esto lo caviló y lo planeó, con la pericia del engaño, con la astucia lo logró, observe la perfidia que usó y sería la misma que usaría en todos los tiempos necesarios:

Usó a la serpiente como instrumento, por su “especialidad de astucia”. Génesis 3:1 Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo.

Luego procuró en buscar plática dialogar con la parte débil del hombre, la “mujer”. Satanás le dice a la mujer: ¿Con que Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?”.

Le respondió la mujer a satanás.

“del fruto del árbol que está en medio del huerto, dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis”. Génesis 3:6.

Luego de aquella charla, vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y era árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió también, así, como ella.

Si analizamos este punto, podemos conjeturar que la caída del hombre no fue en un instante. Hubo muchos pasos que dar hasta ocasionar el alud imaginario que pensaba hacerle al hombre.

Reconstruyamos lo sucedido

Primeramente: El paso que se ve en el texto bíblico es que Satanás pudo “sembrar una semilla de duda en Eva”, para que ésta a su vez, diera el fruto de incredulidad en su corazón.

Eva empezó a fallar en la tentación cuando le dio un cambio a la Palabra de Dios

Te recomendamos ver: Cuando nos llega la tentación

Analicemos un poco

Después que Eva obtuvo la duda en su corazón, estaba lista ahora para entremeterse en la Palabra de Dios. Ella cambió y añadió a la Palabra de Dios frase que no le correspondía haberlo hecho.

Dios no dijo nada de tocar el fruto. Satanás aprovechó el desvió de la palabra de Dios para incitarla y convencerla que Dios lo que no quería es que ellos fueran como él.

En este encuentro de la mujer con satanás hubo seis pasos para que ocasionara la transgresión:

  • Sembrar duda
  • Cambiar la palabra de Dios
  • Ver el fruto como algo bueno
  • Codiciar el fruto prohibido
  • Tomar el fruto en sus manos
  • Comió del fruto del cual se le dijo que no comiera, luego, trasmitírselo a su marido para que éste, también lo consumiera.

Síguenos en Facebook Generación Pentecostal

Todo ser humano debe estar persuadido en conocer la filosofía satánica con la cual se le presentó a Adán.

Eva es tentada

En la tentación Satanás dijo a Eva, “seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal”. Se debe recordar que la tentación misma en sí, no es pecado, pero entregarse a la tentación, sí lo es.

Cuando Eva accedió y se entregó a la tentación, automáticamente desobedeció y fue cuando el pecado entró en el corazón humano.

También Cristo fue tentado, pero permaneció sin pecado porque Él venció la tentación.

Cuando la semilla de desconfianza penetra en el corazón del tentado, el diablo le hace cambiar los pensamientos y como resultado le añade a la palabra de Dios “el a mí me parece”, más de lo que está escrito.

Estas mismas herramientas las utilizó satanás para tentar al Señor Jesucristo, pero el Señor utilizó otro método: citó la palabra de Dios tal cual, como ella es; de esta manera, ganó la victoria usando estos términos “está escrito” y así, venció al diablo.

La desobediencia de Adán y Eva 

La construcción génica, nos enseña que fue Eva la que fue víctima en ser engañada. Adán, escogió pecar deliberadamente.

El desobedeció sabiendo perfectamente lo que hacía. Fue una decisión clara de escoger entre el compañerismo con el creador o del compañerismo con la mujer.

Adán escogió a la mujer, y así, él cayó premeditadamente quedando destituido de la gloria de Dios.

Se suscribe de esta manera que, Eva fue la victima escogida por satanás para introducir el pecado; de igual manera, Dios también la utilizo para darle la promesa de salvación:

Pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; está te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar. Génesis 3:15.

Todo prelado, debe saber que el Señor Jesucristo no procedió de la genética adámica, sino la de la mujer por obra del Espíritu Santo.

Recuerda que nuestro tema de hoy es «El hombre en el huerto del Edén»

Estimado Hermano

No olvide que esta pericia, el diablo siempre la ha usado desde el principio. 1 Juan 2:16 “Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo”.

Aquí vemos tres cosas:

  • Los deseos de la carne
  • Los deseos de los ojos
  • La vanagloria de la vida

Estos tres procesos el diablo los ha usado en varias ocasiones:

La utilizó en Eva. Génesis 3:6: el fruto se notaba “bueno para comer”; “agradable a los ojos”; “Codiciable para alcanzar la sabiduría”.

Ese mismo procedimiento lo usó con Acán en Josué 7:21: Acán “Vio”; “codició”; “tomó”; y “escondió”.

El diablo le consiguió el lado débil al hombre; él sabía, y estaba convencido que ningún hombre en la historia lo podría vencer, siempre los tendría debajo de sus pies. Si alguien quería levantarse lo seguiría aplastando hasta lo sumo.

Por eso vemos que los mejorcitos que se conocen en la historia los había derribado por completo.

Por ejemplo:

Noé, que supuestamente era el mejor en su generación, éste después que fue salvo del gran diluvio, se emborrachó y por ello trajo la maldición.

Abraham, el padre de la fe, lo hizo dudar y por ello trajo el cautiverio en Egipto por cuatrocientos años.

Esaú, el primogénito de Isaac, hizo que vendiera por un plato de lenteja la primogenitura, como resultado se ganó el aborrecimiento de Dios.

Jacob, hizo que engañara a su padre para que le diera la bendición de su hermano, como resultado se ganó el desmembramiento de la familia.

José, lo puso a adivinar en una copa y como resultado se ganó la vestimenta de los egipcios.

Moisés, el hombre más manso de la tierra, lo hizo airar al descender del Sinaí, y como resultado quebró las tablas de la ley.

Aron, el primer sumo Pontífice lo hizo que hiciera un becerro de oro y como resultado no entró a la tierra prometida.

Josué, lo engaño haciendo pacto con los cananeos y como consecuencia no siguió repartiendo más la tierra prometida.

Sansón, el hombre de las fuerzas lo casó con una inconversa (Filistea) y como consecuencia le sacaron los ojos.

Saúl, el primer rey de la monarquía hebraica, lo puso a cuidar ganado del anatema, y como consecuencia no pudo seguir reinando.

David, el dulce cantor de Israel, le hizo que matara a un soldado para quitarle la mujer, y como resultado la espada nunca se apartaría de su casa.

Salomón, al sabio de las edades, le proporcionó mil mujeres para que ellas les desviaran el corazón y como resultado el reino se dividió en dos fracciones.

Elías, el profeta del fuego, lo hizo correr una hechicera y como resultado lo suplió otro.

Hermano lector

¿Cuál sería la conclusión ante esta situación? ya que los mejorcitos en la historia el diablo los había barrido por completo; y esta era una razón por la cual el diablo permanecía dormido en sus laureles confiando en sus pericias y en sus armas.

Te invitamos a seguir con la lectura de hoy El hombre en el huerto del Edén

Sin embargo, desde que Adán pecó, hasta nuestros tiempos, vemos a Dios como si estuviera inquieto buscando al hombre.

La escatología mesiánica se inquieta y se pronuncia de lleno de esta manera: Isaías 49:24, ¿Será quitado el botín al valiente? ¿Será rescatado el cautivo de un tirano?

Pero así dice Jehová: Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano, y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvare a tus hijos.

La inquietud profética se articula. En Isaías 35:4…«Dios mismo vendrá y os salvará».

Isaías 52:6, «Por tanto, mi pueblo sabrá mi nombre por esta causa en aquel día; porque yo mismo que hablo, he aquí estaré presente».

Apreciado hermano y amigo, este tema lo he escrito para compartir con ustedes las diferentes maquinaciones de satanás y para que conozcas parte de sus confabulaciones, sino eres creyente estás viviendo es sus áreas que no es más que un calabozo sin salida.

También te puedo interesar: Viento mas fuego combinación perfecta

Toda cristiano debe estar convencido que los demonios son nuestros enemigos, y que el Señor Jesucristo los venció a todos en la cruz del calvario. Y esta es una razón convincente, por la cual debemos vivir mejor la vida cristiana.

Gracias por llegar al final de esta maravillosa lectura del día hoy «El hombre en el huerto del Edén»

SUSCRÍBETE

Únete a más de 5.000 personas que ya reciben contenidos exclusivos.
Sólo ingresa tu correo electrónico en el campo de abajo y espera el correo de confirmación.

[wysija_form id=»1″]

Copyright y engrosado por el pastor
York Anthony Shalom
Licenciado en Sagrada Teología
Magister en Divinidades Teológicas
Jorgesalomserpa@hotmail.com

Por: York Antony Shalom

Artículo anteriorLa parábola el hijo pródigo
Artículo siguienteCaracterísticas de la iglesia primitiva